SOLO POR HOY

No es pobre el que no tiene mucho sino el que ambiciona demasiado.
El pensamiento mágico que existe es que nos haremos muy rico apostando.
He dicho esto en broma, pero ¿es realmente lo que creo? ¿Por qué quiero siempre más? Más cosas, más ropa, más dinero, más pérdida dinero para seguir apostando hasta que me haga rico.
La verdad es que tengo lo que necesito. Estoy agradecido por mi abstinencia y la serenidad que conlleva. Habiendo puesto mi voluntad y mi vida al cuidado de Dios tal como yo lo concibo, no necesito sentir la agonía. Tanto en esto como en cada área de mi vida, Dios está haciendo por mí lo que yo no puedo hacer por mi mismo.

Sólo por hoy:

Acepto con gratitud todas las bendiciones que son mías gracias al programa de JA.

No hay en el mundo nada tan peligroso como la verdadera ignorancia y la estupidez concienzuda.

A veces me encuentro a gente, incluso en JA, que en su afán de ayudar, me ofrecen sugerencias que no son adecuadas para mi. Pero yo ya no necesito actuar de acuerdo a consejos cuestionables solamente para no ofender a alguien.
No estoy en este programa para jugar el viejo juego de complacer a la gente. Sé, por encima de todo lo demás, que mi recuperación está antes que nada y que nadie; que éste es un derecho correcto y necesario.
Escucho amablemente a todos los que me ofrecen su ayuda, pero sigo las sencillas instrucciones del programa de doce pasos y mantengo mis ojos y oídos abiertos para encontrar un padrino cuyo interés principal sea ayudarme a encontrar lo que sea más adecuado para mi.

Sólo por hoy:

¿La fortaleza de aquello los jugadores compulsivos que tienen lo que yo quiero se ajusta a mis necesidades?

No hay fruta que no sea amarga antes de madurar.

La experiencia no se adquiere sin lesiones y dolor.
Por eso es que digo que me siento agradecido de ser un jugador compulsivo.
Sin la enfermedad no hubiera conocido Jugadores Anónimos y al programa de recuperación de doce pasos,
que ha sido llamado el diseño para una vida sana y feliz.
Desear los beneficios de madurar sin tener que pasar por el dolor del crecimiento, es fútil. Evitar el dolor detiene el crecimiento; y cuando el crecimiento se detiene lo que sigue es el retroceso. La recuperación requiere ir a través de cada paso, sintiendo todos los sentimientos y
teniendo la paciencia de esperar los resultados.

Sólo por hoy:

Acepto con gratitud cualquier progreso que voy haciendo, por pequeño que sea.

No intentes ver demasiado lejos.

Si fuéramos capaces de ver el futuro sería realmente aterrador.
Igualmente triste e inquietante, sin embargo, es el muy familiar hábito de Algún día.
"Algún día, empezaré esas clases de baile... me inscribiré como voluntario en un hospital...haré ese crucero por las islas griegas."
He vivido demasiado tiempo en el futuro.
Mi vida transcurre ahora, y hay una sola manera de vivirla: Ahora.

Sólo por hoy:

Ni quiero saber el futuro, ni vivirlo antes de que llegue.

No luche con sus problemas. Sepa que hay una solución.

Cuando lucho, o me resisto a un problema, estoy realmente fortaleciéndolo, y debilitando mis oportunidades de encontrar una solución.
Si pienso constructivamente para resolver una dificultad,
un curso de acción aparecerá.
Pensar constructivamente, es saber que un Poder más grande que yo está dirigiéndome, y que este Poder ya tiene la respuesta.
Al pedir la ayuda de Dios acerca de un problema, tomo cualquier acción posible, sabiendo que cada paso me acerca más a la solución.

Sólo por hoy:

No hay problema que no pueda llevar a Dios, y ninguno para el que Dios no tenga solución.

No mires atrás

«Los pasos brindan la oportunidad de un gran cambio
en una vida dominada por la culpabilidad y el
remordimiento. Nuestro futuro se ve transformado
porque ya no tenemos que evitar a quienes hemos hecho
daño. Como resultado logramos una libertad nueva que nos permite poner fin al aislamiento.»

Muchos llegamos a Jugadores Anónimos llenos de remordimientos por nuestro pasado. Los pasos nos ayudan a empezar a resolverlos. Examinamos nuestra vida, admitimos nuestras faltas, las enmendamos y tratamos sinceramente de cambiar nuestro comportamiento. Al hacerlo, descubrimos una placentera sensación de libertad.
Ya no debemos negar o lamentar el pasado, una vez efectuadas las enmiendas, lo hecho queda atrás y desaparece. A partir de entonces, lo más importante ya no es de dónde venimos, sino hacia dónde vamos.
En JA empezamos a mirar adelante. Es verdad, vivimos y nos mantenemos en abstinencia, sólo por hoy, pero descubrimos que podemos empezar a tener metas y sueños, y a esperar las satisfacciones que la vida en recuperación tiene para ofrecernos. Mirar al futuro nos mantiene centrados en nuestro rumbo, no en los lamentos ni remordimientos por nuestro pasado. Después de todo, si miramos atrás es difícil avanzar.

Sólo por hoy:

Los pasos me han librado de los remordimientos de mi pasado. Hoy, miraré adelante, a mi nueva vida en recuperación.

No nos recuperamos de la noche a la mañana

«Los Doce Pasos de Jugadores Anónimos son un proceso de recuperación progresivo integrado en nuestra vida diaria.»

Al cabo de un tiempo en recuperación, es posible que nos enfrentemos a lo que parecen problemas personales abrumadores, sentimientos de ira y desesperación.
Cuando nos damos cuenta de lo que pasa, tal vez nos lamentemos: «Pero he trabajado tanto. Yo pensaba que estaba...». ¿Recuperado, quizás? Ni por asomo.
Oímos infinidad de veces que la recuperación es un proceso continuo y que nunca estamos curados.
Sin embargo, a veces creemos que si trabajamos los pasos lo suficiente, rezamos bastante y vamos a muchas reuniones, con el tiempo... Bueno, quizás no nos curemos, pero algo haremos.
Y hacemos «algo». Nos recuperamos de la adicción activa. Por muchas cosas que hayamos resuelto mediante el proceso de los pasos, siempre habrá algo más.
Lo que no recordábamos o no nos pareció importante en nuestro primer inventario, sin duda aparecerá por sí solo más adelante.
Emprendemos una y otra vez el proceso de los pasos para ocuparnos de lo que nos molesta.
Cuanto más empleemos este proceso, más confiaremos en él porque veremos resultados.
Pasamos de la ira y el resentimiento al perdón, de la negación a la honestidad y aceptación, del dolor a la serenidad.
No nos recuperamos de la noche a la mañana y nuestra recuperación nunca termina.
Pero cada día nos brinda la oportunidad de sanar más y la esperanza de seguir haciéndolo mañana.

Sólo por hoy:

Hoy haré lo que pueda por mi recuperación y tendré esperanzas en el proceso continuo de ésta.

No podemos saber lo que vale la pena dar … a menos que sepamos como aceptarlo.

Es terrible recibir; no sé que hacer, lo que decir. Tanto si es un cumplido como un regalo, balbuceo o tartamudeo embarazado, musitando ridículas pero clásicas negativas como, “¿Esta vieja alfombra?… La compré en la tómbola de caridad”. Sólo más tarde me doy cuenta de que en mi intento de parecer modesto, he insultado a la persona que me estaba haciendo un simple elogio.
Me gusta la sugerencia de un miembro que practica el amor duro: “Di ‘gracias’ y luego cállate”
Guardo como tesoros las instrucciones fáciles que comprendo, y el amor de JA que las transmite.

Sólo por hoy:

Estoy dispuesto a practicar decir “gracias” hasta que me salga con naturalidad.

No poses tus ojos en cosas muy lejanas.

La gente infeliz no vive en el presente. Tiene sus ojos en un distante futuro en el cual todo será maravilloso.
Los jugadores compulsivos ya no serán adictos algo los "arreglará" mágicamente y ellos vivirán las vidas que siempre soñaron tener.
La tragedia de proyectar, por supuesto, es que todo es una fantasía; ese bello futuro se convierte en este despreciado presente.
Hoy ya no me engaño con esa ilusión. La única forma de asegurarme de conseguir el mejor futuro posible es vivir hoy lo mejor que pueda.

Sólo por hoy:

Me niego a sacrificar el hoy por un mañana que nunca llega.
Tengo todo lo que necesito para vivir hoy.

No puedes rezar una mentira

Tan imposible es engañar a esa parte de mi que lleva la cuenta de mis delitos, como lo es engañar a Dios.
Las reuniones de JA, el compartir con otro miembro, me ayuda a verme a mi mismo con honestidad.
Según voy siendo consciente de mis defectos, estoy más dispuesto a aceptarlos, viéndolos como fallos humanos,
no como pecados imperdonables. Si puedo hablar de ellos, puedo rezar para ser liberado de ellos.
Seguir tapando mis defectos mata el camino del crecimiento. La honestidad libera mi vida de la ilusión,
la racionalización y la auto justificación. La honestidad mira, descubre y acepta.

Sólo por hoy:

De la misma forma que la verdad me liberó de la obsesión por la apuesta, puede liberarme de los otros problemas de vida. No tengo miedo de buscar la verdad.

No se hace un lago de un solo chaparrón.


JA es tan cálido y seguro como un remanso. Estoy contento con su protección y la necesito tanto como al principio, aunque quizás no de la misma forma. Al principio de llegar a JA, la gente compartía sus sentimientos mas profundos y luego me decían, “Déjanos amarte hasta que puedas amarte a ti mismo”. Y crecí; he llegado a cuidar de mi mismo, y a gustarme la persona que soy.
¿He permitido que la complacencia se haya adentrado en mis pensamientos? ¿Cuándo no tengo ganas de ir a una reunión me digo a mi mismo que no me necesitan; que estarán estupendamente sin mi? En esos momentos, recuerdo lo que significa ser un jugador compulsivo sin saber que es posible una recuperación como la que tengo hoy. ¿Dónde estaré cuando alguien necesite ver un milagro como aquellos que llegaron y hablaron en mi primera reunión?

Sólo por hoy:

¿Cuál es la mejor forma en que puedo ayudar a otro jugador compulsivo? Yendo a las reuniones, tanto si me apetece como si no.

No se sabe el límite de cómo pueden complicarse las cosas, teniendo en cuenta que una cosa siempre conduce a otra.

Una cosa puede llevar a la otra sólo si se lo permito.
Las celebraciones no tienen que ser iguales un año tras otro.
Las festividades pueden ser más simples, se puede
cambiar el énfasis y hacer un cambio de valores.
¿Quién dice que las apuestas de vacaciones pueden estar al acecho?
¿Por qué no un paseo simple y satisfactorio, disfrutando
sólo la compañía de aquellos que me importan?
Si me detengo y pienso acerca de lo que es importante,
puedo prescindir de lo inútil, el mal hábito.
Puedo planear mis vacaciones para poder estar más
cerca de mi familia de JA y de mi familia real.

Sólo por hoy:

El verdadero espíritu de darse a uno mismo y a los demás, es hacerlo fácil: no permitir que nada complique
mi abstinencia y mi manera de vivir según JA.

No se trata de sentirse bien.



Durante nuestra adicción activa, la mayoría sabíamos exactamente cómo íbamos a sentirnos de un día para otro.
Lo único que teníamos que hacer era leer los "premios" de las fechas de los sorteos o saber que juegos había en los casinos y tragamonedas.
Plantificábamos nuestros sentimientos y el objetivo del día era sentirse bien.
En recuperación, estamos expuestos a sentir de todo
de un día para otro e incluso de un minuto para otro.
Quizás estemos animados y felices por la mañana, y por la tarde deprimidos y tristes.
Como ya no plantificamos nuestros sentimientos del día cada mañana, a lo mejor terminamos con sentimientos incómodos, como estar cansados a primera hora y muy despiertos en el momento de acostarnos.
Naturalmente siempre existe la posibilidad de que nos sintamos bien, pero no se trata de eso. Hoy en día, nuestra preocupación fundamental no es sentirnos bien,
sino aprender a entender nuestros sentimientos y tratar con ellos, independientemente de cuáles sean.
Lo hacemos trabajando los pasos y compartiendo con los demás.

Solo por hoy:

Aceptare mis sentimientos, sean los que sean, tales como son.
Practicaré el programa y aprenderé a vivir con ellos.

...No tendré miedo a disfrutar de la belleza y creer que tanto como yo dé al mundo, el mundo me dará a mí.
Sólo por hoy
¿Cómo es posible tener miedo a disfrutar de lo que es bello? Seguro que no hay amenaza alguna en la belleza.
Fue justo el miedo a vivir, lo que realmente me hizo esconderme en la apuesta.
Tener miedo a la vida es tener miedo a todo tanto a lo bueno como a lo malo, tanto a la belleza como a la fealdad.
Respecto a dar al mundo, me corresponde a mí el primer movimiento, soy yo quien debe correr a encontrarse con la vida con una sonrisa que diga "Estoy feliz aquí." Gustarse a uno mismo, disfrutar de la vida y tener entusiasmo por sus preciosos regalos, eso es dar al mundo

Sólo por hoy:

Mi liberación de la obsesión por la apuesta, me devuelve el derecho que Dios me dio para disfrutar de la naturaleza de este mundo y no tener miedo a demostrarlo.

No tengas miedo a la vida.

Cree que la vida merece la pena vivirse y tu creencia ayudará a crear el hecho.

Di Si en vez de No. Aplica este principio a todos los problemas de tu vida.
Aborda tus dificultades con la creencia de que todo
incluso el problema mismo está ayudándote a encontrar la solución.
Con tal filosofía no hay sitio para el miedo.
No tendrás miedo si crees realmente crees que la vida está contigo y quiere que resuelvas tus problemas.
Cree que puedes estar abstinente. Lo estarás.
Cree que puedes tener sano juicio, paz de espíritu y libertad para vivir la vida que deseas. Lo conseguirás.
Cree que te recuperarás. Lo harás.

Sólo por hoy:

Afirmo que dentro de mí tengo lo que necesito para vivir una vida abstinente y sobria; y creo que la vida merece la pena vivirse.

No vemos la naturaleza con nuestros ojos, sino con nuestro entendimiento y nuestro corazón.

La lógica está muy bien en el mundo de los negocios, pero no tiene mucho que ver con la vida. La vida desafía la lógica. Las deducciones no tienen cabida en el crecimiento.
Las razones y racionalizaciones son lo que yo usaba para dar rienda suelta a mi enfermedad de jugar compulsivamente.
Hoy confío en los sentimientos intuitivos no confundirlos con las emociones centradas en mi mismo como la ira y los celos para que me hablen de cosas ajenas a mi mismo.
¿Qué necesita escuchar un recién llegado?
¿Cómo le va a un viejo amigo?
¿Cómo le hablo a alguien que tiene problemas?
¿Qué necesidades puedo satisfacer?
La intuición va mucho mas allá de las palabras, viene de una percepción compasiva, que es uno de esos regalos de mi Poder Superior que crecen cada vez que los transmito.

Sólo por hoy:

Confío en un sentimiento intuitivo, más que en medir y sopesar los hechos y dichos.

Nos necesitamos mutuamente.

«Cualquier persona puede unirse a nosotros sin que
importe su edad, raza, preferencia sexual, credo, religión ni la falta de esta última.»

La adicción a los juegos de azar nos cerró la mente a cualquier cosa nueva o diferente.
Pensábamos que no necesitábamos nada ni a nadie.
Las personas de otro barrio, de otra raza, de diferente origen étnico o de una clase social o económica distinta no tenían nada que valiera la pena.
Quizás pensáramos que lo diferente, era malo.
En recuperación, no podemos permitirnos semejantes actitudes.
Llegamos a JA porque nuestras mejores ideas no nos llevaron a ninguna parte.
Si queremos crecer en nuestra recuperación, debemos abrir la mente para experimentar lo que funciona, independientemente de dónde venga.
Al margen de nuestro origen personal, en JA todos tenemos dos cosas en común que no compartimos con nadie más: nuestra enfermedad y nuestra recuperación.
Dependemos unos de otros para compartir nuestra experiencia; y cuanto más amplia sea la experiencia, mejor.
Para hacer frente a los numerosos retos de vivir sin apostar compulsivamente, necesitamos cada una de las experiencias, todos los puntos de vista diferentes que podamos encontrar sobre nuestro programa.
La recuperación muchas veces no es fácil.
La fortaleza que necesitamos para recuperarnos la sacamos de nuestros compañeros de JA.
Hoy en día, estamos agradecidos por la diversidad de los miembros de nuestro grupo, porque en esa diversidad hallamos nuestra fortaleza.

Sólo por hoy:

Sé que cuanto más diversa sea la experiencia de mi grupo, más podrá apoyarme en las diferentes circunstancias a las que me enfrente.
Hoy en día, doy la bienvenida a adictos a los casinos de todos los orígenes a mi grupo

Nuestra necesidad más importante

«Con el tiempo redefinimos nuestras creencias y nuestra
comprensión hasta ver que lo que más necesitamos es
conocer la voluntad de Dios para con nosotros y obtener
la fortaleza para cumplirla.»

Cuando llegamos a JA por primera vez, teníamos todo tipo de ideas sobre lo que necesitábamos.
Algunos centrábamos nuestras aspiraciones en amasar fortuna personal.
Pensábamos que la recuperación equivalía al éxito exterior. Pero la recuperación no equivale a éxito.
Hoy en día, creemos que nuestra necesidad más importante es la orientación espiritual y la fortaleza.
El daño más grave causado por nuestra adicción fue de carácter espiritual.
Nuestra motivación principal estaba dictada por la enfermedad: conseguir dinero, apostar, y encontrar formas y medios de conseguir más. Nuestra vida, esclavizada por la abrumadora necesidad de dinero,
carecía de sentido y coherencia. Estábamos en bancarrota espiritual.
Tarde o temprano nos damos cuenta de que nuestra necesidad más importante en recuperación es «conocer la voluntad de Dios para con nosotros y obtener la fortaleza para cumplirla».
Es ahí donde descubrimos el sentido y la razón de ser que nuestra adicción nos había ocultado.
A través de la voluntad de nuestro Dios nos libramos de la terquedad.
Como ya no nos impulsan sólo nuestras necesidades, tenemos la libertad de vivir con los demás sobre una base de igualdad.
El éxito exterior no tiene nada de malo; pero sin el contacto espiritual que nos brinda el programa de JA,
por mucho «éxito» que tengamos, no queda satisfecha nuestra necesidad más importante en recuperación.

Sólo por hoy:

Trataré de satisfacer mi mayor necesidad:una relación vital con el Dios que yo concibo, que me sirva de orientación.

Nuestra vida entera, con todo nuestro estupendo código moral y nuestra preciosa libertad, consiste en última instancia en aceptarnos a nosotros mismos como somos.

¿Qué es la autoaceptación? ¿Significa aceptar mis buenas cualidades y rechazar las de los demás? No. Autoaceptación significa tomarme tal como soy y gustarme todo yo, sin condiciones.
Puede que no me guste estar en accion realizando apuestas compulsivas en varios lugares, pero esto no tiene nada que ver con que me guste la persona que soy. YO NO SOY MI apuesta compulsiva.
Ni tampoco soy mi timidez. Ni mi torpeza física, o mi pelo tieso. Hay mucho más en mi que cualquiera de estas características. Incluso si hiciera una lista de mis atributos conocidos, seguiría sin revelar todo lo que hay que saber sobre mi.

Sólo por hoy:

No es una señal de orgullo, sino de humildad saber que soy único y hermoso, y que no apuesto a nada en la vida.

nuestras limitaciones

«No debemos conformamos con las limitaciones del pasado. Podemos examinar y reexaminar nuestras viejas ideas.»

La mayoría llegamos al programa con muchísimas limitaciones autoimpuestas que nos impiden desarrollar todo nuestro potencial, limitaciones que bloquean nuestros intentos de encontrar los valores esenciales de nuestro ser.
Ponemos limitaciones a nuestra capacidad de ser de verdad nosotros mismos, limitaciones a nuestra capacidad de funcionar en el trabajo, limitaciones a los riesgos que estamos dispuestos a correr... la lista parece interminable.
Si nuestros padres o maestros nos dijeron que nunca tendríamos éxito, y les creímos, lo más probable es que nunca lo hayamos tenido.
Si nuestro medio social nos enseñó a no valemos por nosotros, no lo hicimos, aunque todo en nuestro interior pugnara por hacerlo.
En Jugadores Anónimos iniciamos un proceso por medio del cual podemos reconocer la falsedad de estas limitaciones.
A través del Cuarto Paso descubriremos que no queremos conservar todas las reglas que nos enseñaron.
No deseamos ser víctimas perpetuas de nuestras viejas experiencias. Tenemos la libertad de descartar las ideas que inhiben nuestro crecimiento.
Somos capaces de ampliar nuestros límites para abarcar nuevas ideas y nuevas experiencias.
Somos libres de reír, llorar y, sobre todo, disfrutar de nuestra recuperación.

Sólo por hoy:

Me desprenderé de las limitaciones autoimpuestas y abriré la mente a nuevas ideas.

Nuestro más importante anhelo en la vida, es alguien
que nos haga hacer lo que podemos.

Sólo existe una persona que puede hacerme hacer lo que soy capaz: yo mismo. Pero necesito todo el apoyo que pueda tener de mis amigos, padrinos y cada uno de los miembros de JA que van a las reuniones semana tras semana.
Es importante tener claro en la mente que otras personas tienen sólo su amor y su apoyo para darme y para inspirarme a trabajar el programa y obtener la abstinencia; pero ellos no pueden hacer estas cosas por mí.
La ayuda más fuerte y confiable que tengo es la de mi Poder Superior, que está allí, para mí todo el tiempo y cuya voluntad es que lo haga lo mejor que pueda.

Sólo por hoy:

Estoy poniendo las habilidades que Dios me dio al mejor uso en este programa, gracias a la presencia de Dios en mi vida y a mis compañeros de JA que están siguiendo el mismo sendero.

“O bien el ser humano debe sufrir y luchar como precio de una visión más profunda, o sus miras serán estrechas y sin ninguna revelación intelectual.

Del dolor de jugar compulsivamente llegó la abstinencia; del desorden, la serenidad.
Cuando siento dolor, necesito escuchar estas palabras, “ESTO TAMBIÉN PASARÁ”.
Recuerdo otras luchas y las recompensas que surgieron de ellas. Como Bill W. escribe,
“Nuestra mayor comprensión tiene muchas veces sus raíces en nuestras anteriores locuras…
En La Economía De Dios, Nada Se Desperdicia”.
El dolor persiste hasta que dejo de intentar hacer las cosas a mi manera.
Estoy agradecido por el sufrimiento y la lucha que me llevó a esta comprensión.
“SOLTAR RIENDAS Y ENTREGÁRSELAS A DIOS”
es una idea que nunca hubiera aceptado si no hubiera pagado el precio impuesto por mi enfermedad.

Sólo por hoy:

Estoy agradecido de que el dolor de jugar compulsivamente me diera la visión de no tratar de cambiar el mundo, a otras personas, situaciones o incluso a mi mismo, sino de hacer el trabajo de a pie y dejar los cambios a mi Poder Superior.

Observando a las gaviotas, pensé: "Ese es el camino a tomar: encontrar el ritmo perfecto y seguirlo con absoluta confianza. "

La compulsión es la voluntad propia desencadenada.
En el polo opuesto, la abstinencia sin esfuerzo es estar en armonía con el ritmo del universo, "ir con la corriente," soltar las riendas y entregárselas a Dios.
Cuando entrego mi compulsión a Dios, encuentro ese ritmo perfecto y lo sigo con absoluta confianza.
Es lo más cercano que un humano puede llegar a ser parte de la naturaleza.
Al hablar de su experiencia de rendición, un JA recuerda sentir más que oír cierta música que parecía hecha por todos los elementos de la naturaleza ella misma incluida actuando en armonía.

Sólo por hoy:

Hay más qué experimentar al entregar mi vida al Poder Superior, de lo que podría haber imaginado

Opciones

«No elegimos convertirnos en adictos a los juegos de azar.»

Cuando éramos pequeños todos teníamos sueños.
Todos los niños han oído a un pariente o a un vecino preguntar:
«¿Qué quieres ser de mayor?» Aunque algunos no tuviéramos sueños elaborados de triunfo, todos deseábamos un trabajo, una familia y un futuro de dignidad y respeto.
Pero nadie nos preguntó: «¿Quieres ser un ludopata cuando crezcas?»
No elegimos convertirnos en adictos, y no podemos elegir dejar de serlo.
Tenemos la enfermedad de la adicción.
No somos responsables de tenerla, pero sí lo somos de nuestra recuperación.
Después de enterarnos de que somos personas enfermas y que hay una forma de recuperarse, podemos dejar de culpar a las circunstancias o a nosotros y empezar a vivir la solución.
No elegimos la adicción, pero podemos elegir la recuperación.

Sólo por hoy:

Elijo la recuperación.

Oración honesta

«Practicar la honestidad es difícil, pero ofrece grandes recompensas.»

¡Qué difícil nos resulta ser honestos!
Muchos llegamos a JA tan confundidos sobre lo que realmente había pasado en nuestra vida que tardamos meses y años en aclararlo.
La historia que hemos contado no siempre es verdad.
¿Cómo podemos empezar a ser más sinceros?
Para muchos, la forma más fácil para ser honestos es la oración.
A veces nos resulta difícil decir toda la verdad a nuestros compañeros adictos.
Estamos seguros de que si permitimos que los demás nos conozcan de verdad, no nos aceptarán.
¡Es duro tener que vivir a la altura de la imagen de ser los más «listos»
del mundo que tantos de nosotros aparentábamos!
En la oración, descubrimos la aceptación de nuestro Poder Superior que nos permite abrir el corazón sinceramente.
Al practicar esta honestidad con el Dios que concebimos, muchas veces vemos que el efecto se trasmite a nuestras relaciones con los demás.
Adquirimos la costumbre de ser honestos. Empezamos a practicar la honestidad cuando compartimos en las reuniones y trabajamos con otros.
A cambio, nuestra vida se enriquece con amistades profundas.
Incluso descubrimos que podemos ser más honestos con nosotros mismos:
¡la persona más importante con la cual ser francos!
La honestidad es una cualidad que se desarrolla con la práctica.
No siempre es fácil ser totalmente sinceros, pero si empezamos con nuestro Poder Superior, nos resulta más fácil hacer extensiva nuestra honestidad a los demás.

Sólo por hoy:

Seré honesto con Dios, conmigo y con los demás

Perseverar, confiando en las esperanzas que uno tiene, es valor.
El cobarde desespera.
Hay momentos para la tristeza y las lamentaciones, pero una cosa es lamentarse y otra muy diferente negarse a seguir adelante.
Antes de tener el programa de JA no tenía ningún camino que seguir.
El fin de mis desdichas no estaba a la vista.
Hoy tengo un camino que seguir, gente con la que estar,
una madrina y padrino que me guía.
Puede no apetecerme hacer algo, pero ahora sé que la respuesta es la acción, como lo fue cuando entré en mi primera reunión.
Dios me da el valor para confiar, para dar ese primer paso, para llegar a un amigo.

Sólo por hoy:

Con la abstinencia, y el apoyo de JA, tengo el valor para vivir.