VOCES DE RECUPERACION

“El padrinazgo, los amigos de JA, las reuniones y la literatura son maravillosas fuentes de ayuda para nosotros. No queremos estar sin estos recursos porque frecuentemente encontramos en ellas las palabras de Dios hacia nosotros”

Como jugador compulsivo tiendo a ser compulsivo en todo lo que hago, aún en el servicio.
Naturalmente quiero ocuparme de todos poniéndome a mí misma al final de la lista.
Mi padrino reconoce los síntomas y amablemente me recuerda que quizá yo tenga demasiadas cosas en mi mochila.
Me sugiere que consulte con mi Poder Superior antes de comprometerme a algo que pueda ser una carga demasiado pesada para mí.
Algunas veces pregunta: “es necesario que decidas hoy?” Mi respuesta generalmente es “no”.
Esto significa que puedo dejar el asunto por un rato y ocuparme de él luego.
Dios me habla a través de otras personas, especialmente mi padrino, cuando escucho.

“El Paso Doce nos invita a continuar el camino un día a la vez por el resto de nuestras vidas. Necesitamos continuar avanzando en nuestra recuperación, desarrollando nuestra conciencia espiritual si vamos a permanecer despiertos espiritualmente y vivos completamente“

A través de la práctica de los Doce Pasos he tenido un despertar espiritual. Y continuando la práctica de estos principios a lo largo de mi día, puedo librarme de mi atadura a la comida. Como dice en el Libro Grande de JA, creo que debo trabajar diariamente para mantener mi condición espiritual.
Estoy muy agradecida de que mi Poder Superior me ha quitado la obsesión de apostar y la ha reemplazado con el deseo de usar las herramientas de este programa que me permiten vivir.
Confío en que no importa lo que pase en mi vida hoy apostar no me quitará el dolor ni va a hacerme “sentir mejor”.
Me he dado cuenta que nada sucede en el mundo de Dios por error. Lo mejor que puedo hacer hoy es continuar con la próxima cosa que está frente a mí, y todas las cosas pasarán.

“El Paso Doce nos invita a continuar el viaje un día a la vez por el resto de nuestras vidas.
En recuperación necesitamos movernos hacia delante, seguir desarrollando nuestra conciencia espiritual, si nos vamos a mantener despiertos espiritualmente y completamente vivos”
Hay un temor que pido a mi Poder Superior no me libre nunca: el temor de la complacencia. Varias veces he venido a este programa llena de dolor y desesperación. Y luego me fui creyendo estar curada.
Dos cosas me han llevado a mis caídas, la negación a someterme y la complacencia.
Hoy estoy convencida que no tengo poder con la apuesta y si permito que me invada la complacencia mi vida se tornará ingobernable. Cuando no me tomo el tiempo de leer, hacer llamadas, dar servicio o hablar con mi Poder Superior, he dejado de avanzar en mi recuperación.
Mi enfermedad ha ganado una batalla y mi enfermedad no necesita muchas batallas para declarar la victoria.
La complacencia es un aspecto poderoso y de temer en mi enfermedad.
Cada día necesito recordar que el viaje en el que estoy está lleno de esperanza y vida. Si me mantengo en el camino mi Poder Superior me guiará hacia delante.

Buenas tardes, necesito de su ayuda o consejos soy esposa de un ludopata

Estuvo internado en un centro de rehabilitación como 2 meses y no se haya lo siento temeroso

Es mi obligación hablar con la gente a la que le debe? Por que la gente piensa que yo soy responsable de pagar sus deudas yo ni enterada estaba, nunca vi su dinero así como lo conseguía lo apostaba ya me decide de terrenos y carros, que hago quisiera creer que esto tiene solución? Llevo 3 años lidiando con esta enfermedad y mis 3 hijos están chicos ellos no saben nada

Hola Gaby, yo creo que alguno de los compañeros que tiene más experiencia te puede apoyar con tus dudas, probablemente Paraca que es esposo de una ludópata al igual que tú. Lo que pasa es que esta consulta está acá dentro de los pensamientos de J.G.M. y puede que no todos la vean. Te recomiendo que comiences un tema acá en el foro con tus consultas. Si no sabes cómo hacerlo me avisas y yo te puedo ayudar. Saludos.

“El Paso Once nos anima a practicar la oración, continuar la comunicación con nuestro Poder Superior diariamente, aún cuando parezca un ejercicio sin sentido”

La oración cambia las cosas, esto es muy claro para mí.
En mi vida anterior como un adicto a la apuesta desesperado y enfermo usé bien mi cerebro pero fui un agnóstico espiritual. Simplemente no creía en nada.
Luego, como sugirió mi padrino, comencé a decir “buen día” a Dios cada mañana solo para ver qué sucedía.
El resultado fue extraordinario, Dios venía a mí cuando yo iba a Dios. Él tomó mi alma vacía y la llenó con su presencia.
Hablar con Dios todos los días es ahora parte de mi vida, simplemente no puedo vivir sin ello.
Veo a la oración como un ejercicio para el alma y para el cerebro. Ahora debo vivir mi vida a través del alma y la mente.
Ningún pensamiento es inútil como tampoco lo es ninguna oración. La oración cambia las cosas.
Cuando no me gustan los cambios puedo tener la seguridad de que esos cambios han venido de Dios.

El Paso Siete nos pide adoptar una actitud de humildad.
No creí que podría esbozar una actitud de humildad necesaria para trabajar el Paso Siete y proceder. Entonces me di cuenta de que primero practique la humildad aceptando mi impotencia en el Paso Uno, admitiendo mi falta de sano juicio (Paso Dos), dejando que Dios tome el control (Paso Tres), admitiendo mis defectos de carácter (Paso Cuatro) y luego compartiendo los defectos (Paso Cinco). Así que he estado practicando la humildad. Simplemente no había tropezado con la palabra “humildad” antes.
Como se me ha concedido humildad a lo largo del camino, esta prueba confirma que se me concederá la suficiente para continuar el camino de los Doce Pasos.

“El Poder Superior es el único apoyo que siempre está disponible para nosotros y es lo suficientemente fuerte para dirigir nuestros pasos por el camino de la vida.”

Apostar compulsivamente, buscar consuelo en otros y los comportamientos adictivos, era la forma como yo enfrentaba la vida antes de conocer JA.
Ahora confío plenamente en que Dios me dirigirá amorosamente en todas las situaciones que la vida me presenta cada 24 horas.
La habilidad de mantener la abstinencia a pesar de la falta de un hogar, el dolor que dejan las recaídas emocionales y la inseguridad financiera son evidencia de un Poder Superior a mí.
Practicar diariamente la oración y la meditación me permite establecer un contacto directo y consciente con el origen de la recuperación y la fortaleza.
Cuando voy desbocadamente por la vida los defectos de carácter reaparecen, confío en que mi Poder Superior me hará volver al camino del sano juicio.
Estando en recuperación disfruto de una íntima relación con Dios, de los amigos, la familia, la comunidad de JA y de un sano y seguro hogar.
Estoy agradecido de estar superando la obsesión por apostar y los comportamientos dañinos.
Una gran alegría, que en el pasado solamente podía imaginar es mía hoy con Poder Superior dirigiendo mi vida.

El Poder Superior Me Trajo Amor
¿Intimidad? ¿Qué es eso? Por lo menos, así es como pensaba yo antes de mi recuperación en JA. No tenía ni idea de dónde estaban la intimidad y confianza. Bueno, tuve una relación de seis años a los veinte años, pero duró solamente porque mi pareja y yo nos manteníamos a cierta distancia con discusiones y abuso de sustancias y apuestas compulsias. Me gustaba mantener a todo el mundo a distancia, así podía atiborrarme sin que nadie lo supiera. La apuesta era mi mejor amiga, mi amor y mi vida, lo mismo que mi dolor, mi enemigo más odiado y mi locura.
Estaba felizmente soltera cuando llegué a JA. No más relaciones enfermizas para mi. ¡No, señor!
Permanecí sola durante mi primer año de recuperación, lo que me ayudó a ser más consciente de lo que me gustaba, lo que no y de arenas movedizas.
A causa de mi recuperación, pude tener citas como un adulto en vez de cómo una niña de 5 años necesitada de amor. Por medio del contacto con otros miembros que tenían relaciones amorosas sanas, aprendí a nadar en el mundo de las citas con un fuerte sentimiento de lo que me convenía. Observar cómo otros utilizaban el programa para enfrentarse a la vida fuera de las reuniones me ayudó enormemente.
Durante los primeros meses de citas en recuperación, aprendí esas palabras esenciales: “no, gracias”. Cuando un hombre muy agradable con el que había estado saliendo me dijo que bebía mucho, le agradecí su honestidad y dejé de verle. ¿Por qué? Porque un rápido “no, gracias” pronto era más fácil que años cuesta abajo de “¿por qué no dejas de beber y me amas?”.
Creo que el Poder Superior me trajo el amor. Gracias a mi conexión con lo divino, estuve lo suficientemente cuerda para ser honesta con mi primera pareja después de la recuperación. Antes de volver a salir con alguien hice una lista de requisitos para no olvidar lo que más importaba. Mi nueva pareja cumplía todos los requisitos de esa lista. El más importante es que mi nuevo amor debía tener un camino espiritual.
Creo que eso es lo que fortaleció nuestra relación lo suficiente para casarnos. Por la gracia del Poder Superior estamos casados desde hace seis años. Durante estos años he hecho muchas reparaciones y pedido ayuda más a menudo de lo que creí posible nunca. Aprendí que el amor puede ser manejado con los Pasos Uno, Dos y Tres.
He hecho llamadas en las que lo único que podía decir era: “Soy impotente ante los sentimientos relacionados con mi marido. Sé que el Poder Suprior puede encargarse de ellos. Entrego mis sentimientos sobre mi marido al Poder Superior”. Una vez y otra el Poder Superior me ha ayudado a quitarme de en medio y mantener una cada vez mejor relación matrimonial.

El Poema De Un Niño

Volvía a casa después de llevar a unos invitados al aeropuerto cuando me di cuenta que estaba peligrosamente cansada. Me imaginé que me esperaba una larga noche. Mientras tanto, mi hija de 11 años y su prima decidieron ver una película.
“¡Aja!” pensé y se encendió una luz en mi cerebro, “estaré sola y puedo darme el lujo de irme al casino a jugar ”.
Mientras llevaba a las niñas al cine planeé el hecho. Estaba irritable y lista para saltar. No podía esperar a estar sola. Deje las chicas y ya estaba en mi camino a realizar mi apuesta. Racionalizaba que lo haría esta vez y luego pararía. Volvería a empezar mañana con firmeza ( no apuesto mas ), pero en este momento sentía que estaba en un punto sin retorno.
Un minuto antes de entrar al casino, me vino mi hija a la mente. Nuestra relación había mejorado en los años de mi recuperación y continuaba siendo un gran apoyo.
Me acordé de un poema que ella me había escrito. Me inundó la sensación de darme cuenta de su desilusión con respecto a mí, si perdía mi abstinencia esa noche.
Las líneas de su poema corrieron veloces en mi mente: “Cuando apuestas una vez , quieres otra vez , luego otra vez, luego muy pronto, no paras mas”.
Llena de emoción, pude pasar por el casino y no entrar.
Quiero contarles que mi hija toma mi enfermedad muy seriamente. He sido hospitalizada dos veces, una por complicaciones por muchas noches sin dormir y un ataque te tensión y otra vez, para volver a tratar las secuelas me quedaron. Ella sabe que esta enfermedad es traidora, astuta y poderosa. Cree que también puede ser fatal.
Cuando llegue a casa, saque el poema de mi bolso donde siempre lo guardo y leí la última línea.
“… Mamá, sin jugar compulsivamente, puede parecer que te falte algo, pero sin ti, no seria lo mismo…”
Me quede de pie en el patio y mire los árboles que se balanceaban. Las lágrimas empezaron a rodar por mi cara. Entré e hice una llamada a una amiga de JA.
Yo también creo que esta enfermedad es poderosa y si se deja sin control, es fatal.
Esa noche, mi Poder Superior me hablo a través de las palabras de mi hija.
Gracias, Poder Superior, por darme voluntad para escuchar.

Washington, USA

“El problema es con el control de las apuestas compulsivas
¿Esta uno preocupado controlando las apuestas compulsivas hasta el punto en que esto está interfiriendo con su vida?
De la misma manera que ser un alcohólico no se relaciona con la cantidad de bebida, ser jugador compulsivo no se trata de la cantidad que uno apuesta.”
Gasté años pensando que si solamente pudiera de cierta forma, apostar socialmente cierta cantidad que no afectara mi economia, podría ser feliz a pesar de todos los problemas que la vida pusiera en mi camino. Yo pensaba que la razón por la que yo no tenía una vida era porque estaba apostando. Obsesionarme por estas cosas me impidió tener una vida.
Mi ludopatia era solamente la manifestación física y emocional, que yo tuve que construir para aislarme del dolor de vivir. Lo que yo realmente necesitaba era un Poder Superior que controle mi vida y me ayude a manejar mis sentimientos, miedos e inseguridades.
Hasta que renuncié a tratar de controlar lo que apostaba pude darme cuenta de que tengo una vida para vivir y es buena. Hoy le entrego mi vida a Dios, confiando en que El me permita ir hacia lo que El quiere que yo haga, sea y experimente. Le doy gracias a Dios por amarme y oro para que El me ayude a amarme.

“El rendirnos, entonces es un evento inconsciente. No es deseado por el individuo. Puede ocurrir solo cuando uno se involucra con su inconsciente en circunstancias que marcan la necesidad innegable de un poder externo más grande. La definición de rendirse puede comprenderse solo cuando todas sus ramificaciones inconscientes y significados internos verdaderos son puestos de manifiesto. Observado por los otros tal individuo manifiesta una calma interna y una actitud de “vive y deja vivir”

Sentí alivio cuando leí esto. Significa que no puedo controlar mi proceso de rendirme. Yo solo puedo estar dispuesto y hacer el trabajo. Asistiendo a las reuniones, llamando a otros miembros de JA, leyendo, escribiendo y trabajando los pasos, llegué a estar listo para aprender y me puse a mi mismo en una serie de circunstancias que mostraron la innegable necesidad de un Poder Superior externo.
Comencé a ver que empezar un plan para dejar de apostar todos los lunes, el primero de año y en mi cumpleaños no dio resultado y nunca lo daría, pero JA podría. Para que JA me de resultado yo debía estar dispuesta a rendirme y practicar los tres primeros pasos.
Después de trece meses en JA mi rendición sucedió una mañana de Julio. Me rendí. Me cansé de estar enferma y cansada. Llamé una amiga que estaba abstinente, le pregunté qué hacía ella y adopté un plan diario firmemente. He estado imperfectamente abstinente desde ese momento.
Hice esa llamada telefónica hace más de veinte años y lo que dio resultado en ese momento todavía es efectivo. Estoy agradecida a JA y rezo por rendirme continuamente, por mi abstinencia y una vida maravillosa, un día a la vez.

“El servicio en JA ha sido un factor sorpresivamente
poderoso en nuestra recuperación”

Cuando llegué por primera vez a JA, me hice a un lado de las oportunidades de servicio. Me dije a mi mismo varias cosas: Yo soy muy nueva, no conozco suficiente el programa para prestar ese servicio, esto toma mucho tiempo de mi trabajo o mi familia y la mejor de todas: “En el pasado, yo he dado mucho de mi misma y de mi tiempo a otras organizaciones. Como no se dar sanamente, voy a tener mucha precaución ahora”.
Para alcanzar los beneficios del servicio tuve que superar las trampas que me tendí para sabotear mis propios intentos de recuperación. Tuve que ofrecerme ciegamente a prestar servicio aunque no me sintiera con la experiencia o con la recuperación o con la salud suficiente para establecer límites apropiados en mi servicio.
Aunque pensaba que era más sencillo para mi no prestar servicio, en realidad era más difícil porque me estaba negando El Instrumento Que Tan Efectivamente Enriquece Mi Recuperación.
Ahora estoy rodeado por “mi gente”.
El mundo no parece tan oscuro y aterrador.

El Trabajo Empieza Aquí

Fui a mi primera reunión de JA el 5 de septiembre de 1991, y pensé que yo era muy honesto por que apostaba lo mio. Estaba medio retirado, tenía 48 años y metido en una vorágine de apuestas, perdiendo varios bienes materiales. Desde marzo hasta septiembre de 1991 fue terrorífico. En esa primera reunión de JA, me comprometí a no apostar pero recaí al otro día. Luego comencé un plan diario como me lo indicaron. Desde entonces he eliminado todos los alimentos que no puedo comer más como un caballero. Escribir sobre los Pasos y leerlo a un padrino es lo que me ha ayudado a mi, y sólo por hoy, la obsesión ha desaparecido.
Empecé a escribir a diario mi plan, (todavía lo hago hoy, sin excepción). Mi primer pensamiento fue que JA no funcionaba, pero la realidad era que debía renunciar a ciertos hábitos que menciona la pagina 17 del combo y entonces comenzó a funcionar.
Hoy se poner mis limites, gracias a mi programa de recuperación, y el programa de unidad.
JA dirige mi vida haciendo de la abstinencia el tema número uno. Practico los Pasos, las Tradiciones y las herramientas en todos mis asuntos.
Lo que también me funciona es coger mis defectos de carácter que dirigieron mi vida durante 48 años y convertirlos en virtudes.
¡El trabajo real empieza aquí!

“El único regalo que puedes hacer es una porción de ti mismo”

En una conferencia vi cómo se aplicaba el paso doce. Mis tres padrinos, quienes están en abstinencia, estaban allí guiando, diciendo cómo hacerlo. Ellos sabían que probablemente no escucharían nada nuevo para ellos mismos. Ellos estaban allí sólo para pasar el mensaje de recuperación a los que aún sufrían con esta enfermedad.
Ellos son una prueba viviente de buena salud, energía y sano jucicio. Son las promesas ejemplificadas. Sus caras brillaban de alegría por sí mismos y por la abstinencia.
Como si esto fuera poco, cuando volvimos a casa, todos asistimos a nuestra reunión. El coordinador nos pidió que compartiéramos nuestra experiencia en la conferencia, hasta que llego el momento en que tuvimos que irnos.
Cuando nos despedíamos uno de mis padrinos me dijo “tengo que irme a casa rápido porque mi nuevo ahijado puede llamar. Simplemente seguía dando, y dando y dando.
Sigo el ejemplo de mi padrino, estoy abstinente, saludable y disfruto mi vida y a todas las personas que están en ella.
Estoy listo para apadrinar. Finalmente tengo algo para dar.

"El verdadero alivio se encuentra en el equilibrio y el sano juicio de la abstinencia. Este alivio es tan puro y profundo que bien vale la pena cualquier dificultad o dolor que tenga que atravesar para alcanzarlo”

Cuando logré estar abstinente por primera vez, atravesé un momento difícil al sentir el dolor que había estado enterrado bajo la apuesta compulsiva. Lo sentía principalmente de noche. Entonces regresaban todos los dolores del pasado: temores, arrepentimientos y una muy profunda tristeza. Exorcicé esos fantasmas con la ayuda de mis compañeros de JA y los Doce Pasos. Usé con frecuencia los instrumentos del teléfono y la escritura. El apoyo que recibí fue increíble.
Estoy tan agradecido!
Actualmente el verdadero alivio es para mí levantarme con ese sentimiento limpio y feliz, sabiendo que estuve abstinente el día anterior.
El verdadero alivios es:
Oír a los pájaros cantar
Respirar el aliento dulce de la vida
Sorprenderme por la belleza de la naturaleza
Amar este momento
Amar a la gente que está conmigo
Estar agradecido en todo momento.
La abstinencia es tan pura y satisfactoria que no la cambiaría por nada.

“Ellos quieren aprender todo lo que pueden, pero nunca saben a quién elegirá su Poder Superior para enseñarles a ellos”

Cuántas veces he orado a mi Poder Superior pidiéndole la solución a un problema o para poder mirar mejor dentro de mí y luego ignoré la respuesta que obtuve.
Muchas veces me he sentado en una reunión y he descartado las sugerencias útiles de otros miembros porque ellos estaban todavía segun yo no entendian nada de lo que yo pasaba.
Tuve una multitud de razones para ignorar las ideas de los otros. Si voy a alcanzar un nivel de recuperación que me libere para vivir una vida sana y feliz debo escuchar con mente abierta y corazón abierto a todos los que Comparten Mi Compulsión.
Cuando descarto una sugerencia porque encuentro falla en el emisor soy yo el que sufrirá.

“Empecé el programa haciendo todo lo que se suponía
que tenía que hacer … Acción es la palabra mágica…

Mi herencia cultural es de individuos religiosos, trabajadores y con determinación.
Aprendí que si se ora intensamente, se trabaja con diligencia y se espera el tiempo suficiente, se puede lograr cualquier cosa. Sin embargo en la guerra con la apuesta yo era una víctima.
Yo soy un, hágalo usted mismo.
Un patrón, la receta, o la idea creativa fija, mi mente, los dedos y los pies en movimiento.
Por qué esperar hasta mañana cuando puedo empezar hoy (en realidad ayer es mejor).
Aquí estaban los Doce Pasos y los instrumentos.
“Sólo hazlo”, me dijeron.
Tenía los dos libros, una lista de teléfono y un padrino.
Mi fortaleza tenía un nuevo equipo de armas y refuerzo de tropas.
Mi campo de batalla era la pagina 17 del combo chico.
Las respuestas para la vida no están en la sala de apuestas, o donde apostaba en diversos lugares.
Ese era el problema.
Hoy vivo en la solución los Pasos y los instrumentos.
Cambié de residencia y el problema se fue.

“En cada junta que fuimos, aprendimos que estábamos en las garras de una enfermedad peligrosa y que la fuerza de voluntad, la salud emocional y la confianza en uno mismo que algunos de nosotros alguna vez habíamos tenido no nos protegían contra ella”

Qué alivio descubrir que no era cuestión de voluntad, vine a JA en estado de desmoralización. No era capaz de llevar a cabo un plan diario y estar abstinente y hacer ejercicio. Deje de Jugar años antes de mi primera reunión JA y deje de fumar un poco después de que descubrí que estaba embarazada. Sin duda yo podría solucionar ahora esto. Entendía acerca de la fe y entregar mi deseo de jugar a un Poder Superior a mí misma. Pensé que debería ser capaz de manejar la apuesta por mi misma. Después de todo, no se trataba de una droga. Eso es lo que yo pensaba!
JA me enseñó una perspectiva totalmente diferente sobre el plan del dia a dia, yo era una adicta, y yo era tan adicta a las apuesta que me volvian loca. Estas cosas afectaron mi mente, cuerpo y espíritu de la misma manera que el juego lo había hecho.
He tenido que rendirme a esta obsesión también.

“En el paso 11 se nos pide que mejoremos la relación con nuestro Poder Superior de la misma manera que mejoraríamos cualquier relación, tomándonos el tiempo para estar con nuestro Poder Superior”

Recurro a mi Poder Superior?
Cuando debo tomar una decisión recurro a mi Poder Superior antes de actuar?
Oro? Escucho?
Usando un reloj despertador mental estableceré un tiempo específico para recurrir a mi Poder Superior durante mi día.
Llegué aquí (desesperado, jugando compulsivamente) haciendo cosas por mí mismo.
Permanezco aquí (abstinente) fomentando mi relación con mi Poder Superior y miembros de JA

“En JA no tenemos programa de alternativo, o alguna receta mágica, lo que tenemos para ofrecer es más que cualquiera de esas cosas: una comunidad en la que encontramos el poder curativo del amor”

Qué o quién es el “Poder Superior a nosotros mismos” que nos puede devolver el sano juicio?
Si es simplemente Dios, porque no hemos sido capaces de orar y poder haber eliminado nuestra compulsión por la apuesta, nuestra cordura restaurada?
¿Por qué es necesario asistir a JA?
Sin duda parte de esa respuesta está en la palabra “comunidad”. En la comunidad de JA, cara a cara con otras personas que comparten nuestro sufrimiento, encontramos el poder que necesitamos para recuperarnos.
JA es donde otras personas nos quieren hasta que aprendemos a amarnos a nosotros mismos.
En JA nos entusiasmamos con la experiencia compartida de la fortaleza y esperanza de otros jugadores compulsivos.
En JA podemos dar el apoyo amoroso a otros que todavía sufren con esta enfermedad.
Dar es esencial en nuestra propia recuperación. La reflexión a solas, la oración, la meditación, la dependencia de Dios…todo esto es de vital importancia para nosotros.
Pero también lo es la comunidad de JA en donde encontramos “a Dios con piel” en cada reunión.

"En lugar de actuar impulsivamente, nos detenemos lo suficiente para entender la voluntad de Dios.
Entonces, en lugar de acudir a la fuerza de voluntad, nos relajamos y nos preparamos para recibir la ayuda de nuestro Poder Superior.
Todo lo que necesitamos decir es ‘Dios, por favor ayúdame a hacer Tu voluntad.’”
En mi recuperación, estoy aprendiendo a silenciarme y
escuchar la voz en mi interior que es mi Poder Superior.
Esta presencia está siempre conmigo, pero en mi manera de hablar cotidiana y al querer hacer todo a mi manera,
esta voz se ahoga a menudo. Cuando me callo y la sintonizo, puedo escucharla fuerte y claro.
Volviendo a las palabras del Tercer Paso cada vez que lo necesite, vivo en recuperación. Esto es un verdadero milagro, saber que a través de estas pocas palabras de súplica permíteme hacer Tu voluntad me muevo hacia algo mejor.
Esto siempre me guía y siempre es un regalo, porque cuando pido voluntad para hacer la voluntad de Dios,
cedo el control de lo que yo creo que debería suceder.
Me sorprendo siempre.

“En tanto nosotros no perdonemos a las personas por los daños que ellas nos hicieron, vamos a encontrar imposible hacer sinceras enmiendas con ellos por nuestro lado de los conflictos”.

Para mi el elemento esencial en el Paso Ocho es el perdón. Hasta que aprenda como perdonar no voy a poder ni siquiera ver dónde está mi falta.
Yo no estaba consciente del profundo resentimiento que tenía en contra de mis padres por el abuso que yo sufrí de pequeña.
Mis inseguridades, temor del rechazo y la baja autoestima fueron todo el resultado directo de la represión de esos sentimientos.
Yo empecé de verdad a buscar en mi pasado y las olvidadas memorias de abuso retornaron.
Como yo las examiné, el odio, humillación y un profundo enojo emergió de mí en mares de lágrimas.
Sabía que no podía perdonar yo misma esos errores, especialmente cuando mi propia rebeldía a menudo era una falta.
De repente se me ocurrió orar por el “espíritu” del perdón. Gradualmente una paz me envolvió.
El perdón vino y con eso se completó la entrega de esos sentimientos dañados.
Desde ese momento yo fui sanado. Una vez que el milagro del perdón ocurrió, las enmiendas sucedieron naturalmente.
Evita los cuatro "demasiados" C.H.E.S.
Evita la obsesión que pone en peligro tu Abstinencia.
No permitas sentirte:
Ni demasiado Cansado,
Ni demasiado Histerico,
Ni demasiado Enojado,
Ni demasiado Solo

“Es en el mensaje de JA en nuestros Pasos y Tradiciones donde encontramos las soluciones a nuestros problemas.
Viviendo por medio de esos principios hemos salvado nuestras vidas”
Los principios de honestidad, esperanza, fe, valor, integridad, voluntad, humildad, disciplina, amor, perseverancia, conciencia espiritual, servicio, unidad, confianza, mente abierta, responsabilidad, aceptación, igualdad y compañerismo deben estar en nuestra mira.
Nuestros problemas nos trajeron a JA. JA nos regresa con nosotros, con nuestros compañeros que sufren y con Dios.
Somos más que nuestros problemas y JA nos da una hermandad para aprender eso.
Cada día tengo opciones. Antes de JA sentía que no tenía ninguna. Todo lo que necesito es trabajar el programa.
Gracias Dios por las personas quienes me han mostrado el camino. Gracias a Dios yo puedo ser útil a alguien más.
Realmente mi vida ha sido salvada y soy un jugador compulsivo en vías de recuperación.
¿Qué principio practicaré hoy?