SOLO POR HOY

Salir del bache.

Durante nuestra recuperación, muchas veces nos rondarán viejos fantasmas.
La vida puede volverse otra vez monótona, aburrida y sin sentido.
A veces nos parece que no cambia nada. Nos levantamos y vamos todos los días al mismo trabajo.
Cenamos todas las noches a la misma hora. Asistimos a las mismas reuniones cada semana.
El ritual de esta mañana ha sido identico al de ayer, y al de ante de ayer, y al de antes antes de ayer.
Tras el infierno de nuestra adicción y la montaña rusa del principio de la recuperación, quizás una vida estable tenga cierto atractivo.... por un tiempo.
Pero a la larga, nos damos cuenta de que queremos algo mas.
Tarde o temprano nos desanima la progresiva monotonía y aburrimiento de nuestra vida.
Sin duda habrán momentos, en que nos sintamos vagamente insatisfechos, con nuestra recuperación.
Por alguna razón nos parece que estuvieramos perdiendonos algo, pero no sabemos qué ni por qué.
Sacamos nuestra lista de gratitud y descubrimos, literalmente cientos de cosas por las cuales estar agradecidos.
Todas nuestras necesidades están satisfechas; nuestra vida es mas plena de lo que jamás hubiéramos esperado.
¿Que pasa, entonces?
Quizás haya llegado el momento de desarrollar nuestro potencial al máximo. Nuestras posibilidades están limitadas únicamente por nuestros sueños. Podemos aprender algo nuevo, fijarnos una nueva meta, ayudar a otro recien llegado o hacer un amigo nuevo. Si buscamos bien, seguramente encontraremos algún desafio y la vida volvera a ser variada, satisfactoria y a tener sentido otra vez.

Solo por hoy:

Haré una pausa en mi rutina y desarrollaré mi potencial al máximo.

La recuperación continuada depende de nuestra
relación con un Dios bondadoso que nos cuida y hace
por nosotros lo que sabemos que es imposible que
hagamos por nuestra cuenta.
Cuántas veces hemos oído en las reuniones que «Dios hace por nosotros lo que no podemos hacer por nuestra cuenta?»
A veces es posible que nos quedemos estancados en nuestra recuperación, incapaces o temerosos de tomar las decisiones que sabemos que debemos tomar para avanzar, o reacios a hacerlo.
Quizás no podamos terminar una relación que simplemente no funciona.
Ó tal vez nuestro trabajo se haya convertido en fuente de exagerados conflictos.
O a lo mejor sentimos que nos hace falta un nuevo padrino o madrina pero tenemos miedo de empezar la búsqueda.
Por la gracia de nuestro Poder Superior, quizás ocurra un cambio inesperado precisamente en el área que nos sentimos incapaces de modificar.
A veces nos permitimos seguir estancados en el problema en lugar de avanzar hacia la solución.
En esos momentos, muchas veces descubrimos que nuestro Poder Superior hace por nosotros lo que no podemos hacer por nuestra cuenta.
Quizás nuestra pareja decide terminar la relación, o nos echan del trabajo, o nuestro padrino o madrina nos dice que no puede seguir trabajando con nosotros y nos obliga a buscar otro.
A veces, lo que sucede en nuestra vida puede asustar, como a menudo pasa con los cambios.
Pero también hemos oído que «Dios nunca cierra una puerta sin abrir otra».
La fortaleza de nuestro Poder Superior nunca está lejos cuando avanzamos con fe.
Nuestra recuperación se ve reforzada por estos cambios.

Solo por hoy:

Confío en que el Dios que yo concibo hará por mí lo que no puedo hacer por mi cuenta.

Las competiciones son para los caballos, no para los artistas.
El arte de vivir es probablemente la forma mas elevada de la expresión personal: uno no se preocupa de lo que está detrás o delante, sino más bien de disfrutar el ahora.
No esperamos una recompensa, ni el día en que todo esté arreglado ni por cuando nos llegue la suerte.
El arte de vivir requiere que me guste a mi mismo, acepte lo que soy y deje de desear ser otra persona.
No hay lugar para fingimientos.
Las personas que han cultivado el arte de vivir son dulcemente amables y profundamente sensibles al tiempo que mantienen su independencia.
Sienten tanto respeto por sus propios valores y opiniones como por los de los demás.

Sólo por hoy:

Al buscar la ayuda de otros en el programa, tengo cuidado de no negarme mis propios derechos.

No aman aquéllos que no demuestran su amor
¿Abrazo a los compañeros de JA y les digo que les quiero, pero no tengo tiempo para ellos entre las reuniones?
Es fácil pronunciar las palabras y ser sincero pero las palabras no son suficiente.
El amor se demuestra en la acción: preocupándose, haciendo, recordando, escuchando.
Amar significa ser lo suficientemente fuerte como para dejar los problemas de uno a un lado y ser útil a otros.
El Amor No Puede Florecer En Presencia De La Obsesión; No Hay Sitio.
No son suficiente las canciones románticas, hace falta una madurez emocional para poder demostrar amor consistente y duradero.

Sólo por hoy:

Según voy practicando los principios de este programa, mi capacidad de amar crece.

¿Qué es la dignidad sin honestidad?

¿Quién dice que no es digno para una mujer o un hombre adulto jugar al balón con los niños vecinos o patinar por el medio de la calle?
La dignidad es una cualidad que se consigue al liberarse uno mismo de toda arrogancia y auto bombo. Cuando me presento ante el mundo como realmente soy, consigo la dignidad sin ningún esfuerzo.
La verdadera dignidad depende de un respeto honesto hacia uno mismo sin mentiras y sin la tentación de verme a mi mismo mejor o peor de lo que soy.
Aceptarme a mi mismo como soy me confiere una dignidad natural que está libre de toda pretensión y cerca de la humildad que me esfuerzo en conseguir día a día.

Sólo por hoy:

Si me siento falto de dignidad, busco las ocasiones en las que puedo haber sido poco honesto.

Recaída.

Habrán momentos, sin embargo en los que tendremos ganas de apostar.
Queremos escapar nos sentimos terriblemente mal.
Hace falta que nos recuerden de donde venimos y que esta vez será peor.
Es en este momento cuando más necesitamos el programa.
Si estamos contemplando la posibilidad de una recaída,
deberíamos imaginar nuestra época de miseria espiritual, físicas, emocional hasta el amargo final, al borde del suicidio, las rejas de la cárcel y de algunos que se suicidaron o murieron en la mas terrible miseria.
¿Cuántos conocemos a personas que recayeron después de muchos años limpias y que murieron a causa de la enfermedad?.
Pero hay una muerte que acompaña el regreso a la adicción activa quizás peor que la muerte física.
Se trata de la muerte espiritual que experimentamos cuando nos apartamos de nuestro poder superior.
Si apostamos, la relación espiritual que hemos forjado a lo largo de los años, se debilita y puede hasta que desaparezca.
Nos sentimos realmente solos
Sin duda pasamos por períodos oscuros en nuestra recuperación. Solo hay una manera de superar estos momentos difíciles: con fe.
Si creemos que nuestro P.S nos acompaña, entonces sabemos que todo saldrá bien.
Por muy mal que nos sintamos, una recaída nunca es la solución. Juntos descubrimos la recuperación.
Si nos mantenemos limpios, se disipa la oscuridad y llegamos a un contacto mas profundo con nuestro Poder Superior.

Solo por hoy:

Agradezco a mi P.S el regalo de J.A. Se que una recaída no es una salida. Cualquiera sea el desafío que se me presente, lo afrontare junto a el Dios que yo concibo.

Ser totalmente sincero con uno mismo es un buen ejercicio.

La principal función del programa de doce pasos es volver las cosas de arriba abajo.
Aunque mi tendencia fue en otro momento barrer las cosas bajo la alfombra, para evitar la realidad a mis propios ojos, hoy encuentro un alivio a muchos de mis resentimientos y a mi ira observándome con sinceridad.
Cuando en otro tiempo me daba prisa en culpar a alguien y a algo de mis problemas, hoy son mis propios motivos y acciones los que acaparan mi atención.
La honestidad conmigo mismo es un tratamiento excelente para lo que me duele, especialmente para las emociones destructivas de ira y resentimiento.

Sólo por hoy:

la sinceridad conmigo mismo me hace sentir bien conmigo mismo

“Si podemos compartir lo que hemos aprendido, si podemos aplicarlo en todas las áreas de nuestras vidas,
nosotros habremos cumplido con nuestra tarea para la cual hemos sido puestos en esta tierra”
Esta es la esencia verdadera del programa: continuar compartiendo el mensaje de JA con todos los que comparten nuestra compulsión.
Cuando vivimos el programa y lo seguimos en todos nuestros asuntos, damos un ejemplo que muestra a otros que JA da resultado. Más que hablar acerca del programa, es hacerlo.
El programa de JA tiene tres aristas: CONCIENCIA, ACEPTACIÓN Y ACCIÓN.
Nuestra CONCIENCIA empieza en el Paso Uno y continúa a través de los pasos, especialmente en los Pasos Cuatro y Diez.
La ACEPTACIÓN de nuestra conciencia viene gradualmente a medida que trabajamos los pasos.
Luego viene la ACCIÓN que necesitamos tomar. Para eso miramos la voluntad de Dios para con nosotros.
El paso Tres es nuestro punto de partida por el cual ofrecemos nuestras vidas y nuestra voluntad a nuestro Poder Superior.

Sólo por hoy:

Compartiendo lo que hemos encontrado y actuando en nuestras vidas continuaremos llevando el mensaje de JA.

SOLO HABLAR DE UNO MISMO, PARA MI PROPIO BIENESTAR.

“SE HONESTO, HABLA DE TI”. Con este lema los compañeros de J/A nos recuerdan que la “enfermedad” esta dentro de nosotros, que somos los autores de nuestra propia enfermedad, que “cada vez que nos alteramos, no importa cual sea el motivo, hay algo que no esta bien en nosotros, aun si otro nos ofende, si nos molestamos también andamos mal.
Significa examinar nuestras emociones, sentimientos, a nuestros motivos, siempre realizando nuestro inventario moral no el de los otros. El exhibir a otras personas relatando profusamente como son, como actúan y que tanto nos han hecho, puede parecer que alivia pero solo acrecienta nuestra enfermedad. Para quienes estamos en el programa ha sido mas eficaz poner la mira en lo que se encuentra en nuestro interior. Entonces sacaremos un verdadero provecho de compartir en las reuniones.

GRAFICA LO QUE SIENTES
Con graficar nos referimos a describir lo que la emoción nos hace física y mentalmente con el propósito de sacarla fuera y que esta baje.
Hemos aprendido que cada emoción genera un complejo de síntomas físicos e imágenes mentales. Por ejemplo: una emoción puede alterar nuestra respiración, generar palpitaciones, nauseas, temblores, dolores, cambios en la presión sanguínea y la temperatura corporal, mareos, contracturas, pueden hacernos sentir “mariposas en el estomago”, que nos lagrimeen los ojos, sensaciones extrañas, enfermedades, catarro, asma, etc. (Incluso alteran la bioquímica cerebral pero de esto no nos percatamos de manera directa).
Por otra parte acompañando estas expresiones físicas, en nuestra mente (lo que algunos llamamos “el loco”) se comienzan a generar pensamientos o imágenes la mayoría de las veces absurdas con las que logran controlarnos.
Por ejemplo: Si estamos enojados con alguien podemos llegar a imaginar que torturamos o asesinamos a esa persona. Si cometemos un error pensamos que todo el mundo se burlara de nuestra torpeza (como si nos hubieran filmado). Si estamos arrepentidos de algo que hicimos imaginamos una y otra vez que volvemos en el tiempo y cambiamos nuestras acciones. Cuando estamos preocupados imaginamos los peores desastres. Si tenemos fobias nuestro desequilibrio se agrava.
Cada uno genera sus propias imágenes, y sus rasgos particulares de pensamiento. Lo importante es ser honestos y hablar de cuales son nuestros temores y deseos, que saquemos a la luz detalladamente lo que pasa por nuestra mente.
Especialmente es útil cuando hablamos del pasado extendernos en esta descripción, procurando revivir lo que sentíamos, lo que pensábamos. Dado que esta es una de las aplicaciones del (Paso Cinco leerlo) como resultado obtendremos liberar la carga de esas emociones constreñidas por años, veremos como el dolor de viejos traumas se desvanecen.
Si nos empeñamos en esta tarea de extendernos, de ser exhaustivos en las descripción de nuestras emociones podremos ver como los síntomas que nos arruinaban la vida pierden su poder de acelerarnos o paralizarnos.
Al conocer su origen, podremos empezar a actuar sensatamente a pesar de ellos. Al actuar diferente comenzaremos a sentir diferente. Así que: “A SACAR EMOCION!”.

UNA COSA A LA VEZ
La herramienta de elegir un tema nos permite aprovechar mejor nuestro tiempo para hablar en la reunión, como refiere la Quinta Tradición en el libro: “Mejor hacer una cosa bien, que muchas mal”.
EL hablar de una conducta sintomática de nuestra enfermedad y profundizarlo hasta donde podamos, es mucho mas beneficioso que tratar muchos temas de manera superficial.
No importa tanto el tema en si como el hecho de que seamos honestos e intentemos sobreponernos al autoengaño.
Al indagar en un tema crece nuestro autoconocimiento y el dolor por el pasado se diluye, pues el hablar en las reuniones es sin duda una práctica del Paso Quinto.
Algunos temas para iniciarse en esta practica pueden ser: la autocompasión, la sed de perfección, la sed de poder, el remordimiento, la cólera, la dependencia; Juan, María o José, la soledad, la obstinación, la depresión, el suicidio, el PS, el odio, la envidia, nuestra mascota, la fe, el amor, la honestidad, la autosuficiencia, la prisa, etc., etc., etc.

IR AL HISTORIAL
La experiencia nos ha mostrado que aquellos que “aquellos que no aprenden de sus errores están condenados a repetirlos”. Por esto hemos de buscar en nuestro pasado como nuestro egoísmo, nuestra auto-obsesión nos ha afectado. Tratar de hallar esos patrones de conducta enfermizos que hemos utilizado tantas veces, cuando los identifiquemos podremos hacer algo para corregirlos.
Comentando ante nuestros compañeros los actos de mal juicio (o sean los daños que se refieren en el octavo paso) podremos tomar conciencia de cómo nos destruíamos a nosotros mismos lastimando a los demás. Repasar el paso 8
Como dice Bill W. en el “Doce y Doce” debemos descubrir “como, cuando y donde se deformaron nuestro instintos naturales” ( los nuestros, no los de los demás).
En nuestro pasado esta el origen de nuestro comportamiento enfermizo actual. Reviviendo el sufrimiento pasado lo concientizamos y tendremos sinceros deseos de cambiar nuestra forma de ser hoy.

COMENTAR EL DIA DE HOY
Hablar del día de hoy es una manera de practicar el inventario del Décimo Paso. Un buen modo de constatar nuestro avance en el programa y especialmente ver donde estamos fallando, de aclararnos a nosotros mismos los asuntos que nos están haciendo resbalar.
También es útil para tomarlo como hilo conductor que nos lleve a revisar nuestro historial.
Seguramente nuestro pasado es muy amplio, pero si tomamos aquellos temas que hoy nos están haciendo tocar fondo, podremos ver como a lo largo de nuestra vida hemos recurrentemente respondido en la misma manera enfermiza al mismo tipo de situaciones.
Dicen que locura es cometer los mismos errores esperando resultados diferentes, y nosotros ciertamente estábamos locos.

TRABAJAR UN TEMA

Esto es algo que hacemos generalmente por sugerencia de quien nos apadrina o algún otro compañero. Consiste en atrapar un tema que nos desestabiliza, Trabajarlo implica interrogarnos sobre nuestros sentimientos, indagar porque estamos dependiendo emocionalmente de el. Tratar de hallar en nuestros defectos el origen de nuestra atracción o rechazo de ese asunto.
Trabajarlo es no soltarlo hasta sentir que encontramos las razones y que el tema ha perdido su carga emocional. Mientras una circunstancia (o una relación) nos acelere o nos paralice excesivamente será un tema que seguir trabajando.
Puede llevarnos cinco reuniones o cinco meses, no caigamos en el temor de estar aburriendo a los compañeros con el mismo tema otra vez, eso no seria mas que una excusa, al grupo venimos por nuestra recuperación y es primeramente para nosotros mismos para quien hablamos, no para los demás.

HACER PREVENCION
Merced a esta herramienta podremos sacarle el jugo al autoconocimiento que hemos ido adquiriendo. Al saber como han sido nuestras reacciones pasadas en determinadas situaciones podemos prevenirnos. Mediante el trabajo de nuestro historial en ese tema, logramos estar alertas para no reaccionar como era nuestra costumbre y en cambio poner los “medios” del programa con la ayuda de nuestro Poder Superior.
Lo mismo si la situación que enfrentaremos es algo nuevo, en el pasado cuando no sabíamos como actuar recurríamos a nuestro repertorio de conductas enfermas, ahora podemos de cierta manera ensayar lo que podría pasar, al tiempo que nos vamos familiarizando con la situación, pedimos a nuestro PS que nos devuelva el sano juicio para poder “accionar” en vez de “reaccionar”.
El prevenir es un real avance, pues es mejor estar alertas y cometer nuevos errores que seguir cometiendo los errores de siempre.

COMENTAR LA AGRECION
“Agrede a la gente aquí” los dicen los compañeros, y cualquiera que tenga la buena voluntad de intentarlo comprobara que al hablar en la reunión grupal podemos descargar la energía emocional.
Cuando deseamos pegar, insultar, criticar, despreciar, o cualquier otra forma de agredir a alguien venimos a la reunión y lo comentamos (o usamos el teléfono, una reunión privada, lo escribimos), expresamos nuestro enojo, envidia, resentimiento, el dolor de nuestro ego lastimado o lo que sea que estemos sintiendo y comprobamos como la honestidad desfoga esas emociones malsanas y ya no nos sentimos compelidos a hacerlo, al grado que podemos incluso sentarnos a conversar con esa persona que apenas un tiempo antes queríamos lastimar.
Si expresamos nuestro “deseo de asesinar” a alguien en la reunión ya no necesitamos hacerlo en verdad.
Antes de hacer nada de lo que después te arrepientas mejor ven al grupo y habla de tu sed de venganza. Pon a la luz lo que la enfermedad te dice (“la loca”) y no lo hagas.

REDONDEANDO
Hablemos de todas las cosas que nos hacen sufrir. Describamos detalladamente los síntomas de la neurosis. No perdamos el tiempo con los detalles que a nadie le interesan como son los sexuales,del perro, del criadero de aves etc. Hablemos lo menos posible de la forma de ser y actuar de otras personas. Concentrémonos en lo que sentimos y no en las anécdotas.
Tratemos de buscar en nuestras actitudes y acciones el origen de nuestros sufrimientos. Expresemos nuestro resentimiento, la colera, el miedo, etc. para que podamos superarlos.
Cuando nuestra “terapia hablada” nos este dando por resultado la estabilidad emocional, recordemos dar las gracias por los frutos al programa, al grupo y a Dios, como cada cual lo comprende. Regalemos nuestra experiencia de recuperación, compartamos como el programa nos ayudo a salir del infierno emocional y como nos ayuda ahora a ser felices y a dejar los juegos de azar. Compartamos los frutos para que no se pudran..


Sólo por hoy:

No necesito ninguna prueba de la existencia de Dios
para decirle gracias por mi abstinencia y mi libertad del juego compulsivo.

Solo por hoy:
Me tomaré mi tiempo para saborear mis éxitos.
Compartiré mis triunfos con una actitud de gratitud.

“Solo por Hoy trataré de tener media hora de quietud para mí y me relajaré.
Durante esa media hora en algún momento trataré de tener una mejor perspectiva de mi vida”
Cuando recién empecé en JA mi padrino sugirió que le diera a Dios por lo menos los primeros quince minutos de cada mañana como mi Paso Once. De esta forma Dios se ocupará del resto del día incluyendo mi abstinencia. Lo hice y mi vida mejoró.
Pronto fue obvio que yo necesitaba estar dispuesta a hacer más que el mínimo en todos los aspectos de mi recuperación.
Como resultado aprendí a aplicar el Paso Once desde el sagrado espacio de mí mañana a todo otro aspecto de mi día: las compras, el trabajo, la cocina, la comida y aún el hacer fila en el correo.
Mientras Más Hagamos Más Se Nos Da.
Cuando comencé a practicar lo mejor que pude los principios espirituales en todos mis asuntos, comenzaron a suceder milagros de recuperación. Comencé a tratar de poner en práctica todo lo que mi padrino y el Libro Grande sugerían. Se me hizo fácil la abstinencia y comencé a sentir “necesidad” por tener una vida basada en principios.
Los milagros siguieron sucediendo y no han parado.
Realmente Da Resultado Cuando Lo Trabajamos.

Un despertar del espíritu.

Lo último que esperábamos era un despertar espiritual.
Pocos llegamos a nuestra primera reunión de jugadores anónimos ansiosos por hacer un inventario personal y creyendo que teníamos un vacío espiritual en el alma. No teníamos ni idea de que estábamos a puntos de embarcarnos en un viaje que despertaría nuestro espíritu dormido.
El Primer Paso, como un despertador ruidoso, nos pone en un estado de semiconciencia, aunque es posible que en aquel momento no estemos muy seguros de si queremos levantarnos o seguir durmiendo cinco minutos mas.
La mano nos que nos sacude suavemente los hombros al trabajar el segundo y tercer paso, hace que nos levantemos, nos desperecemos, y buscamos.
Tenemos que quitarnos las lagañas de los ojos para escribir el cuarto paso y compartir el quinto. Pero a medida que trabajamos el sexto, séptimo, octavo y noveno, empezamos a notar soltura en el andar y el comienzo de una sonrisa en los labios.
Nuestro espíritu canda en la ducha al hacer los pasos décimo y undécimo. Y entonces, cuando salimos de casa vamos en busca de otros a quien despertar, praticamos el duodécimo.
No hace falta que pasemos el resto de la vida en como espiritual. Quizás no nos guste levantarnos por la mañana pero cuando lo hacemos, casi siempre estamos contentos de haberlo hecho.

Solo por hoy:

Utilizare los doce pasos para despertar mi espíritu dormido

La cosa más extenuante en esta vida es no ser sincero.

Una joven que había estado apostando compulsivamente durante trece años antes de encontrar JA se considera a si misma bien calificada para hablar sobre complacer a la gente.
Esto es lo que dijo en su grupo:
"Pensaba que tenía que ir por la vida con la sonrisa plasmada en mi cara. Era dulce, complaciente y educada. Una perla.
Por supuesto, nada de esto era sincero ¿Cómo podría serlo cuando por dentro estaba furiosa, resentida y temerosa?
Mi falsa apariencia era tan extenuante que tenía que resarcirme de algún modo, y una forma segura para hacerlo era apostar.
Hoy, el mismo agotamiento me sobrepasa cada vez que intento duramente causar una buena impresión, o cuando no estoy siendo yo.
Pero está bien cometer errores. No soy perfecta. Estoy progresando y me siento muy agradecida por la oportunidad de hacerlo.”

Sólo por hoy:

Hacer o decir algo que no siento, a la larga me cuesta más de lo que estoy dispuesta a pagar.
Soy tan sincera como puedo, sin ser maleducada o adular a alguien.

La cumbre más alta que un hombre puede alcanzar no es el Conocimiento, o la Virtud, o la Bondad, o la Victoria, sino algo mucho más grande, más heroico y más desesperante: ¡El Respeto Sagrado!

Una de las más grandes bendiciones que un jugador compulsivo puede esperar es la capacidad de asombro: sentirse lleno de una mezcla de maravilla, gratitud y reverencia hacia ese majestuoso Poder que está en cada uno de nosotros y que nos cura del sufrimiento que ningún talento humano o medicina ha podido tocar, y que cambia la más desdichada de las vidas.
Para aquellos que son bendecidos, la primera prioridad de cada día es dar las gracias.

Sólo por hoy:

Yo sólo era responsable por hacer mi plan diario y de mantenerme en abstinencia no realizando ninguna apuesta y de revertir el proceso... que me llevo a la ruina emocional ......... y a la locura total
Yo sólo NO soy responsable por estar abstinente, no apostando a nada en la vida, libre de los síntomas de mi enfermedad. Este es el hecho más grande, importante y digno de respeto en mi vida hoy.

La curación es una cuestión de tiempo…pero algunas veces es también una cuestión de oportunidad.
Hipócrates

"Toma lo que sea necesario" es como dice uno de los lemas de JA. Esto es indiscu¬tible, por supuesto; la curación llega en el tiempo de Dios y no puede ser apresurada simplemente porque la pedimos.
Aunque nosotros los J.A afirmamos que no tiene cura que nuestra adicción por las apuestas se detiene, y a medida que juntamos muchos solo por hoy en abstinencia, levantamos el fondo hasta minimizar la compulsion y de esta manera cada vez estamos mas lejos de volver a la acción de apostar.
Sin embargo hay que estar pendiente de la oportunidad.
Un miembro con muchos tiempo de abstinencia recuerda que todo lo que hizo los dos primeros años fue recaer,
dejar JA disgustado y volver. Durante ese período tuvo varias experiencias espirituales momentos fugaces en los que se vio libre de la obsesión y sintió la necesidad de empezar inmediatamente a buscar un padrino y trabajar los pasos.
Pero cada vez dejó pasar ese sentimiento sin actuar de acuerdo a él.
Hoy acepta que esto puede considerarse como el "Horario de Dios," pero puntualiza que fue él y no Dios, quien dejó pasar las ocasiones.

Sólo por hoy:

Busco cada oportunidad para la recuperación estar abstinente con paz mental y realizar todas las otras promesas de este programa.

La decepción más grande que sufren los hombres es la de sus propias opiniones.
El viejo cliché: "Todo el mundo tiene derecho a tener sus propias opiniones," es muy cierto. Sin embargo esto no hace todas las opiniones de igual valor.
Por ejemplo, en la cuestión de la abstinencia ¿qué opino yo?
JA se funda en los mismos principios de AA. ¿Es para mí romper mi abstinencia lo que para un alcohólico significa tomar un trago?
Sí.
Aunque el jugador compulsivo no tiene las mismas consecuencias inmediatas: no altera mi mente en la misma forma como lo hace el alcohol, ni con la misma rapidez. No puede olerse en mi aliento. Por lo tanto creo que puedo salirme con la mía.
PERO JUGAR COMPULSIVAMENTE SE MUESTRA EN MI MANERA DE PENSAR.
SOY MENOS CONSCIENTE Y MÁS DISPUESTO A ENGAÑARME A MI MISMO.

Sólo por hoy:

Me acepto tal como soy, pero no me ahorro las preguntas más duras:
¿Tengo el deseo de dejar de JUGAR COMPULSIVAMENTE?
¿He dejado de hacerlo?

La discordia hace que podamos saborear la concordia.
Luchar contra la enfermedad de apostar compulsivamente es como luchar conmigo mismo.
Esa lucha me hizo apreciar profundamente la paz que encontré en JA.
Ésta es una de las razones por las que no lamento haber pasado por todo lo que he pasado para llegar hasta aquí.
Sin embargo, siendo como soy un ser humano, todavía traigo la discordia a mi vida: a veces me irrito ante mis errores y los de otros. Discuto sobre temas sin importancia como si mi vida dependiera de ello; me llevan a comer demasiado y después me odio a mi mismo por ello.
Gracias a Dios, hoy puedo aceptar todo eso. Soy un ser humano y un jugador compulsivo recuperándome un día a la vez.

Sólo por hoy:

Soy consciente del progreso que he hecho en este programa.
Mis momentos de discordia me muestran lo grandes que son mis bendiciones.

La duda forma parte de todas las religiones.
Todos los pensadores religiosos han dudado.
A veces tengo dificultad en creer lo que está frente a mis ojos, sin contar con lo que no puedo ver.
Aunque ya no dudo respecto a mi Poder Superior, tengo períodos en los que me siento muy lejano.
Por medio del dolor y del miedo sentido en esos
momentos, mi fe en la presencia de Dios en mi vida se ha fortalecido.
Por muy sombrío que sea este “período seco” por el que estoy pasando, sé que no he sido abandonado.
La gracia que me salvó antes, todavía está ahí y me será revelada cuando Dios quiera, no como resultado de cualquier cosa que haga o deje de hacer.

Sólo por hoy:

Como siempre, permaneceré abstinente, aceptando las cosas como son y reafirmando que he dejado mi vida en manos de Dios.

La esperanza es la única cosa buena que la desilusión respeta.
La desilusión llega cuando las ilusiones se hacen añicos y no tenemos nada mejor para reemplazarlas.
En las ilusiones que yo tenía como jugador compulsivo estaba a la raíz de mi enfermedad.
Y la más importante de todas era la creencia de que podía pasar mis días con la sola ayuda de la carrera loca de apuestas.
Jugadores Anónimos me liberó de esa ilusión y de muchas otras.
La esperanza de que podría recuperarme me dio la voluntad y la energía para examinar las ideas que me conducían a usar la apuesta como analgésico.
Cuando son expuestas a la brillante luz de la realidad estas ideas mis viejas ilusiones se desintegran en un polvo que es dispersado.

Sólo por hoy:

Hay tanta esperanza en JA que me llena y renueva si sólo voy y escucho.

La esperanza firme, es un estimulante mucho mayor de lo que pueda serlo cualquier alegría conseguida.
Friedrich Nietzsche

Los jugadores compulsivos en recuperación tienen razón al creer en el poder de la esperanza.
Es la gracia salvadora de nuestra enfermedad, una fuerza sostenedora de vida la que nos motiva a continuar.
La esperanza me trajo a Jugadores Anónimos. Necesitaba creer que tenía dentro de mi el poder de cambiar, de crecer.
Hoy, la alegría de la vida es el constante florecimiento de la esperanza.
Un problema es resuelto e inmediatamente hay esperanza de que uno aún más fuerte seguirá el mismo camino. Cuando mas desesperado estoy por encontrar una solución, la esperanza aparece.

Sólo por hoy:

Hay una poderosa esperanza en admitir la derrota, en renunciar a mis locos esfuerzos por controlar situaciones que no me corresponde controlar.

“Las celebraciones de este día se acabaran a la media noche y mañana me despertaré feliz de estar vivo y abstinente.
Una Sala de Juego y un amigo que me invita a ese lugar: estos eventos siempre están ahí y me permiten tomar los instrumentos que el programa amorosamente me ha entregado.
Inicio mi día pidiéndole ayuda al Dios de mi entendimiento. He aprendido a llamar y palabras amables me reciben del otro lado de la línea.
Suavemente me recuerdan el dolor que pensé que me tendía atrapado por siempre y lo más importante que voy a hacer hoy: mantener mi abstinencia.
El agradecimiento me envuelve y tranquilamente digo gracias y mi día pasa. Cuando pongo mi cabeza en la almohada la gratitud me arrulla hasta dormir.
¿Si no hay dolor, ¿en qué trabajaremos para aprender y crecer superándonos?

Sólo por hoy:

Me regocijo que la sensación de estar inquieto...teniendo problemas que resolver, y ajustes qué hacer, me envían al Poder Superior, en vez de ir a la sala de juego y ponerme a relizar una fuerte apuesta compulsiva

La exhuberancia es belleza.

La cultura occidental parece que aplasta la exuberancia. Siendo niños, a la mayoría de nosotros se nos pide que adoptemos un rígido nivel de "buena" conducta en el salón de clase y en la casa. No debemos ser muy expresivos, ni demasiado alegres; resulta frustrante para el adulto que está a nuestro cargo. Pronto los niños imitando a sus mayores, empiezan a burlarse de los alardes excesivos, o de las manifestaciones poco moderadas de lo bien que se siente estar vivos en este bello mundo.
¿Cómo puede reaprender un adulto a expresar su exuberancia? Quizás no sea posible rescatar lo que se perdió, pero con este programa de recuperación casi lo conseguimos. Cuanto más practico portarme "como un niño" especialmente al dar los pasos tercero y undécimo, más se apodera de mi espíritu una incontrolable alegría que demanda expresión.

Sólo por hoy:

No tengo ningún miedo de disfrutar de todo lo que es bello, ni de expresar mi exuberancia en cualquier forma que se me ocurra.

…Nosotros podríamos “actuar como si”.
Esto no significaba que fuéramos deshonestos, o fingir que creíamos en Dios cuando no era cierto, significaba que éramos libres para dejar a un lado las discusiones teológicas y examinar la idea de un Poder Espiritual”.

Este programa me permite experimentar y puedo probar la espiritualidad que funcione para mí. No puedo aceptar algo como verdadero porque otros lo crean.
Yo no tengo que aceptar ninguna descripción particular de un Poder Superior antes de que pueda practicar la oración y la confianza en Dios.
DIOS COMO YO LO ENTIENDO INCLUYE UN DIOS QUE YO NO ENTIENDO.
Yo soy agnóstico acerca de lo que Dios es, pero no soy agnóstico acerca de la efectividad de la oración y de la confianza en Dios.
Mi recuperación va mucho más allá de cualquier pensamiento acerca de la eficacia de la oración y la confianza en que Dios funciona.

SOLO POR HOY:

no apostare a nada, vivire en serenidad este regalo de estar vivo y no haberme suicidado, estar libre y no en la carcel, estar mentalmente normal y no haber perdido mi sano juicio y estar loco

“Nuestras simples oraciones y plegarias humildes son respondidas de formas maravillosas cuando entregamos nuestras vidas al poder transformador de Dios”

La humildad significa que me reconozca y acepte como una persona común.
Ella me libera también de la cadena de superlativos que envuelven mi ego.
No tengo que pasar de ser la superestrella a ser la escoria de la tierra.
Lo que puedo hacer es pedir humildemente la ayuda del Poder Superior para que me dé la sabiduría y así actuar en consecuencia, momento a momento, cada día.
La humildad que he aprendido en JA me ha dado autoestima por primera vez.
Veo que mi valor interno a si como el de mis compañeros siempre estuvo ahí, lo reconociera o no.
Es un don espiritual de cada uno, no es un galardón obtenido solo por algunos.
La humildad me libera de las comparaciones y juicios que me hago a mí mismo y que me clasifican como un perdedor.
Si pido humildemente la guía de Dios para que mi entendimiento le abra la puerta a Su poder, yo estoy más dispuesto, más cercano y con más fe en que el poder de Dios me concederá más de lo que alguna vez soñé.

“Nuestro trabajo es tener la voluntad de dejar ir las viejas actitudes las cuales bloquean la humildad tales como la baja autoestima, la búsqueda de poder y elegoísmo”.

Cuando me uní al programa de JA escuché acerca de la necesidad de ser humilde.
No estaba seguro de lo que los miembros querían decir exactamente con “humildad”, y ciertamente no estaba seguro de si la deseaba.
Pero un día escuché que ser humilde significa estar dispuesto a aprender:
Y pensé, “Creo que puedo hacer eso”
Hay muchas cosas nuevas que he aprendido en JA; cómo mirarme honestamente a mi mismo, cómo utilizar los instrumentos para trabajar los Doce Pasos, como trabajar con los viejos y nuevos resentimientos; como practicar los principios de los Doce Pasos en todos mis asuntos.
Cada día, de una forma u otra, soy llamado a estar dispuesto a aprender.

Sólo por hoy:

Tengo la voluntad de renunciar a mis antiguos mecanismos, las cuales no funcionaron a cambio de una nueva forma de vivir que me ofrece recuperación de mi adicción a la apuesta.

Pronto sentimos y sopesamos lo que nos hacen sufrir los demás; pero lo que no tenemos en cuenta es lo que los demás sufren por nosotros.

¿Me rijo por un doble patrón: uno para mi, otro para ti?
Un patrón doble me permite racionalizar y excusar mi conducta.
Los patrones para otras personas bien, ellos deberían saberlo mejor.
La gente sabe lo sensible que soy, cuán herido me sentiré.
Cuando utilizo a otros para descargar mis miserias, estoy actuando de la misma forma enfermiza que cuando practicaba mi compulsión.
Los que me quieren de forma incondicional me perdonarán, pero no me hago ningún favor a mi mismo blanqueando el asunto y dejando desatendido el problema en sí.
La perspectiva de la recuperación empieza a brillar cuando puedo decir,
“Si me hago concesiones a mi mismo, te haré también concesiones a ti”.
Progresando hacia la cordura y el equilibrio, cada uno de nosotros podemos tratar a los demás como nosotros queremos ser tratados.

Sólo por hoy:

Cuando empiezo a racionalizar algún comportamiento dudoso, me pregunto, “Si otra persona me hiciera esto,
¿Daría La Misma Excusa?”