¿ AMO A JUGADORES ANONIMOS?

¿Amo a Jugadores Anónimos?

Como yo amo a Jugadores Anónimos vivo lleno de preocupaciones, porque siento en mi propia carne lo que les pasa a mis hermanos en el grupo, siempre temo que les ocurra algo malo. Apenas veo una sombra en el rostro de un hermano/a me inquieto, pero debo admitir que si alimento esos temores y estoy demasiado pendiente de los integrantes, termino angustiado y hasta he llegado a enfermarme. Por ello he aprendido que debo dejar a mis hermanos en manos de la presencia del Superior.

Me ha pasado de creer que necesitan mis hermanos, y espero que me cuenten todo, y que ellos hagan todo lo que yo les digo, en el fondo quiero manejarles la vida.

Me harte de equivocarme, y si quiero sobreprotegerlo seguramente le haré mucho daño, y los convertiré en seres incapaces de parar de apostar, se agudizará la inmadurez, etc. Debo admitir que cada integrante de J.A debe hacer su propio camino, y que casi siempre los problemas que la vida le presentará será un aprendizaje, también sus fracasos y desilusiones a mi me enseñaron muchas cosas y me ayudo a ir madurando.

Otras veces me parece que son débiles, pero me he equivocado en pensar que yo los haré más fuerte, solo el amor del Ser Superior y los golpes de la vida fortalecen.

Es importante que yo sepa sugerir desde mi experiencia a mis hermanos, pero debo dejarlos en libertad para que ellos aprendan a vivir con independencia, para ello debo abandonar el control sobre sus vidas y entregarlos en las manos del Ser Superior, ya que nadie a mi criterio lo hará mejor que el, guiando sus pasos en medio de las dificultades del diario vivir, y solo el Ser Superior conoce la intimidad de cada integrante de J.A y que le convendrá mas para su evolución.

Me ha pasado de que cuando algún integrante de J.A al cual he apadrinado lo he dejado en libertad y no pretendí absorberlo, ha sido posible que escuche mis breves y discretas sugerencias y las tenga en cuenta. Logrando de esta manera que me pida ayuda cuando este angustiado.

Todos lo integrantes de J.A pueden tener muchísimas necesidades por ejemplo una afección física por ejemplo. A veces con mi creatividad y sentido común puedo ayudarlo a curarse, pero es mejor buscar un buen médico y pedirle al Ser Superior que ilumine al médico. También una enfermedad puede originarse en un problema del alma, y tendré que ayudarlo a descubrir cual es su conflicto, para ello quizás el hermano deba acudir a un buen terapeuta y pedirle al Ser Superior que el sólo pueda llegar al lugar de sus heridas más profundas.

También a menudo deseo que mis hermanos se realicen, que logren su meta en la vida, que puedan conseguir trabajo y hacer algo que les guste, que progresen económicamente, entonces puedo intentar orientarlos que encuentren su verdadera vocación, pero sin duda debo poner esto en manos del Ser Superior y pedirle iluminación, ya que con frecuencia puedo equivocarme y aconsejar mal.

Quizá me preocupe el carácter de mis hermanos, su manera de ser y de reaccionar, lo puedo ayudar a cultivarse, pero sin olvidarme que ellos no pueden ser una copia de lo que yo soy, solo serán felices si son ellos mismos, ya que somos únicos e irrepetibles.

También si los amo de verdad y quiero que sean felices, y deseo que progresen y que maduren, que tengan grandes virtudes y vayan superando su adicción a las apuestas, y otras adicciones.

De animarlos para que se superen, que sean mejores, pero no debo ser cargoso ni reprocharlos, al contrario debo mostrarles ideales bellos, seducirlos con buenos ejemplos y sugerirle la lectura profunda del programa y trabajar por escrito los 12 pasos de recuperación y de unidad.

Yo le pido a mi Ser Superior que me de Sabiduría para descubrir la mejor manera de ayudar a mis hermanos del grupo.

A menudo surgen diferencias, pero si el grupo esta unido todo se hace mas fácil. El problema surge cuando no hay armonía, cuando no se compartir, cuando no dialogo bien, cuando no se dar cariño.

Quizás a mi me duela la indiferencia, la frialdad que ha veces se produce, la falta de comunicación y los pocos gesto de cordialidad y de ternura.

Pidiendo al Ser Superior mucha creatividad, imaginación, puedo encontrar formas de reunir a mis hermanos de grupo y transmitirles lo que aprendí a través de tantos años, por ejemplo el dar amor, dialogar, respetarse mutuamente. Por sobre todo aplicar el programa de unidad.

He aprendido que el pedir al Ser Superior es muy importante, ya que pidiendo expreso mi confianza hacia el y la suplica me tranquiliza, ya que me enseñaron a descargar todo el peso en el para que el me sostenga, cuando estoy muy afligido confió el mi Ser Superior y me pongo a orar, y trato de serenarme poniendo todo lo que me invade en sus manos.

A veces mis preocupaciones no me permiten serenarme del todo cuando tengo un problema que yo considero importante que debo resolver. Pero al no estar en paz y serenidad no tendré la claridad necesaria para resolverlo. Aprendí que debo dejarlo en manos de mi Ser Superior mediante la suplica contándole lo que me pasa, lo que siento, y luego tengo que meditar en serenidad. Cuando realizo este pedido con humildad dejando en manos de mi Ser Superior este problema queda bajo su bendición divina y me puedo realmente liberar de la preocupación, ya que de esta manera esta suplica es un culto a mi Ser Superior y reconozco que lo necesito y el tiene todo el amor y seguramente me ayudará.

En este pedido me ofrezco a mí mismo, entrego todo mi ser, me hago disponible como instrumento para que el Ser Superior pueda realizar lo que le pido a través de mi. Le ofrezco mi mente, imaginación, mi sufrimiento, mi angustia, le ofrezco todo para él tome y haga llegar la bendición a mis hermanos de grupo y por mi medio mi gesto, de mis palabras y acciones.

Yo me he acostumbrado a pedir, pero por cada pedido concedido, debo ser agradecido. Así como pido ayuda a mí Ser Superior, también en el grupo debo ser capaz de pedir ayuda con confianza. Así como pido perdón a mi Ser Superior tengo que tener la capacidad de pedir perdón a quien yo haya ofendido en el grupo.

También como alabo a mi Ser Superior debo reconocer las cosas buenas que tienen mis hermanos de grupo.

Es decir lo que hago en la oración también debo practicarlo en el grupo, por qué de lo contrario, faltará algo importante en la relación de mí con los hermanos de grupo.

Yo siempre doy las gracias a mí Ser Superior por todo lo bueno que encuentro en mis hermanos de grupo, al comienzo me resultaba difícil, pero con el tiempo se me ha hecho una costumbre.

He visto que los hermanos de grupo tienen una innata estructura dimensión social. Por eso, una espiritualidad que penetre en cada hermano se manifiesta en el modo en que se relaciona con los demás.

Por lo tanto en el grupo encontré mi primer ámbito de expresión y desarrollo, la mayor posibilidad de relaciones auténticas, porque sólo hay una relación auténtica donde no se muestra una máscara, donde no se cuida la apariencia donde yo me manifiesto tal cual soy, y esto me sucede en el grupo.

Yo sostengo que en el grupo es donde tengo la mayor posibilidad de descubrir las mutuas miserias, pues allí no puedo fingir.

En el grupo mis hermanos están sin caretas, y me dan la posibilidad de sentirme libre y ser yo mismo, sin aparentar nada, y aprendo a aceptarme como soy y así puedo construir relaciones verdaderas. Ya que al conocer las debilidades de un hermano conozco su grandeza, ya que puedo conocer su identidad real y sus posibilidades, así reconociendo con realismo y paciencia la combinación de luces y sombras que habita en cada hermano, el grupo es el espacio donde es posible perder el miedo a entregarme por completo y amar a cada integrante.

En el grupo aprendí que esta comunión realista está hecha de muchas ofrendas y de múltiples “negociaciones. En el dialogo sincero que cada uno expresa lo que necesita y que está dispuesto a aportar para salvar a la hermandad de J.A y salvarnos juntos. Ya que cuando el grupo pasa a ser un proyecto común, un bien preciado que los hermanos quieren salvar a toda costa, y no fracasar, entonces se debilitan las envidias, los celos, las pretensiones exageradas, la rutina prolongada y siempre se encuentra una salida posible y creativa a todo problema.

Aunque el sueño de un grupo ideal no parezca posible, sin embargo un intento de ascensión progresiva, de avance continuo, esta dentro de nuestra propia libertad.

En el camino de la recuperación es importante todo lo que estimule a los miembros del grupo a mirarse, a dirigirse la palabra, a tocarse, a derribar las barreras de la indiferencia para alimentar la comunión entre hermanos, ya que en el grupo es el ámbito donde se vive la espiritualidad de sufrir y soportar juntos los fracasos – quizás en silencio-, de festejar juntos los éxitos y las alegrías, de defendernos y apoyarnos de compartir una aventura común que nadie sabe donde terminará.

Por el momento no me sale más nada. Un abrazo a todos mis hermanos de Jugadores Anónimos.

UN SALUDO